¿Alguna vez has visto a un caballo quejarse por estar en el prao en el que está? ¿Alguna vez has visto que hubiese preferido estar en otro sitio, en otra compañía? ¿Alguna vez han dejado de comer yerba porque se ha vuelto algo monótono que hacen todos los días y necesitan algo diferente, un nuevo sabor del que no se hayan aburrido?
La respuesta es NO. Ellos viven en el presente todo el rato, sin imaginarse un futuro mejor, ni tener la esperanza de que las cosas cambien porque saben que no tienen que ser cambiadas. Honran su vida y todo lo que hacen en cada momento. Así están libres de ansiedad, agobio y desesperanza
Los caballos viven en el presente, sin ansiedad ni agobio por un futuro incierto
¿Alguna vez has visto a un caballo quejarse por estar en el prao en el que está? ¿Alguna vez has visto que hubiese preferido estar en otro sitio, en otra compañía? ¿Alguna vez han dejado de comer yerba poque se ha vuelto algo mónotono que hacen todos los días y necesitan algo diferente, un nuevo sabor del que no se hayan aburrido?
La respuesta es NO. Ellos viven en el presente todo el rato, sin imaginarse un futuro mejor, ni tener la esperanza de que las cosas cambien porque saben que no tienen que ser cambiadas. Honran su vida y todo lo que hacen en cada momento. Así están libres de ansiedad, agobio y desesperanza